Mucha gente quiere vivir cerca de la naturaleza en el sur, y claro ¿Quién no ama la idea de tener bosques, montañas y ríos alrededor? Pero, lamentablemente, la gran demanda de terrenos y el rápido crecimiento urbano están causando estragos en nuestros bosques. Se talan cientos, incluso miles, de árboles para crear nuevas urbanizaciones. Es hora de cuidar y devolver a nuestros lugares lo que siempre han tenido!

Los Nativos a raíz desnuda en palabras simples, corresponde al formato simplificado en el que se entrega el árbol, que nos ayuda a simplificar el proceso de venta al público, permitiéndonos eliminar pasos como por ejemplo el embolsado. Así reducimos residuos contaminantes y la planta llega “fresquita” desde nuestro vivero hasta tu jardín. Al eliminar estos costos, podemos ofrecer el producto a un precio mucho más económico.

¿Por qué deberíamos elegir árboles cultivados en vivero en lugar de arrancarlos del bosque?

Aquí te damos algunas razones:

1. Protegemos nuestro hogar natural: Al no sacar árboles directamente del bosque, mantenemos intactos esos preciosos lugares donde la naturaleza vive en armonía. No intervenimos en ella.

2. Más posibilidades de sobrevivir: Los árboles de vivero son como los súper héroes de los árboles. Están más fuertes y preparados para enfrentar los retos de ser trasplantados, así que tienen una mejor oportunidad de sobrevivir y crecer grandes y fuertes. En el bosque tienen condiciones muy diferentes, y al sacarlos de golpe, tienden a enfermarse y morir.

3. Evitamos problemas: Los árboles de vivero pasan por chequeos de salud antes de salir al mundo. Así que nos aseguramos de no llevarnos sorpresas desagradables como enfermedades o bichos no invitados. Es importante saber si el vivero tiene resolución sanitaria del SAG (nosotros obvio que la tenemos 😁).

En resumen, optar por árboles de vivero es como darles un buen inicio de vida a nuestros amigos verdes, mientras cuidamos de nuestro hogar natural. ¡Es una elección ganadora para todos!. No tocamos el bosque, solo lo disfrutamos y contemplamos. Mientras vamos multiplicando su naturaleza y llevándola de vuelta a las parcelas.

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